Renegade´s Diary

Saturday, September 27, 2008

"Somebody up there likes me"

Una muy triste noticia para el mundo del cine. Paul Newman nos ha dejado a los 83 años de edad por un cáncer de pulmón. A pesar de que era una noticia que se esperaba, no por ello deja de ser triste. Nos deja uno de los actores más grandes de la historia del cine. Para el recuerdo quedan sus películas: "Somebody up there likes me", "Dos hombres y un mismo destino", "El Buscavidas", "El Golpe"....Y su última gran aportación al celuloide: "Camino a la Perdición".

Allá a dónde vayas siempre te recordaré diciendo esa gran frase que pronunciabas en tu primera película, esa obra maestra que tanto me ha influído:

"Hay alguien allá arriba a quien le caigo bien"

Descansa en paz.

Thursday, September 04, 2008

"Batman Returns", la madurez de un director

Si ya en "Batman" Tim Burton dejaba claro su sello, sus virtudes, sus defectos y sobre todo su estilo; en "Batman Returns" todo esto se incrementa por diez. Lo cual hace que estemos ante una película mucho más madura, compleja y mejor resuelta. Desde mi punto de vista, es incomprensible que "Batman" haya sido más laureada y mejor valorada que esta "Batman Returns" una película mucho más entretenida, apasionante y rica en matices.

"Batman Returns" vuelve a narrar las aventuras del hombre murciélago, que esta vez se tendrá que enfrentar al inquietante Pingüino y a Max Shreck, un desagradable y malvado empresario de Gotham City. A esto hay que añadir la aparición de Catwoman, un personaje que baila durante toda la película en una elegantísima ambigüedad. La trama se desencadena cuando Max Shreck conoce al Pingüino, pretendiendo utilizarlo para seguir aprovechándose de la ciudad de Gotham mediante mentiras y artimañas.

Para mí, la mayor virtud y mejora de esta película respecto a la anterior es que Burton supo aprovechar al 100 por 100 un guión muchísimo mejor que el anterior. La variedad de personajes es una de las mejoras del guión: mientras en a primera parte teníamos varios personajes totalmente vacíos y desaprovechados, en ésta todos y cada uno de los personajes existentes contienen una gran profundidad y partes memorables(incluso Alfred aparece más con algún que otro diálogo excelente). Por un lado tenemos al Pingüino, un personaje apasionante, que resulta repulsivo y atrayante a la vez ya que empatizamos con su visión del mundo(muy Burtoniana por cierto) y su forma de pensar. El Pingüino es un personaje atormentado, que sufre por no ser aceptado y desencadena su sufrimiento en sed de violencia y ganas de venganza. Quizá residen en él las mejores partes y diálogos de la película, con un inspiradísimo Danny DeVitto que le saca todo el jugo al personaje vistiéndolo de enorme carisma. Por otro lado tenemos a Max Shreck, perfectamente interpretado con Christopher Walken, que a pesar de lo típico de su personaje sabe imprimirle su sello. Lo mejor de Max Shreck son sus motivaciones, tan ambiciosas como absurdas en sí mismas, lo cual le hace interesante y aterrador.

Pero en mi opinión, la reina de la función es Catwoman. Michelle Pfeiffer es Catwoman. Lo hace tan bien que me cuesta imaginar a otra actriz para este papel. Por otra parte el personaje es tan rico en matices, tan impresionante, que aterra y pone los pelos de punta. Su ambigüedad, provocada por una brutal caída que propicia Shreck al personaje al principio del film(increíble este momento), hace que Catwoman no sepa ni quién es, ni por qué está dónde está. Todo esto nos lleva a Batman, que en esta entrega está mucho mejor escrito y esto favorece a Michael Keaton, que pasa de sosainas en la primera parte a darle más carácter al personaje. Digo que todo esto nos lleva a Batman porque tanto el personaje de Catwoman como el Pingüino son dos nuevos Batman. Los tres forman un triángulo de gente despreciada, complicada, que no saben muy bien por qué están en el mundo y que buscan una forma de ser aceptados y redimirse.

Vamos al apartado técnico. Burton se sale. Desde el principio que es absolutamente impresionante: el preludio en el que además de incluír los títulos de crédito nos presenta al Pingüino y su traumática historia con una secuencia casi muda en la que la música y las imágenes hablan por sí solas. La elegancia de Burton no tiene discusión, usa la cámara de forma que todo parezca natural, brillante. Este tío nació para llevar a cabo las puestas en escenas más impresionantes, más elegantes y más brillantes y en esta película queda muy patente esta característica. Se nota que en esta entrega, además de aumentar el presupuesto, la Waner le dió vía libre a Burton y eso se agradece. Muchas cutreces de la primera parte(como la coraza del Batmóvil) se ven mejorados con creces y el film profundiza más en la historia huyendo de la supuesta espectacularidad.

En fin, una película brillante, que sin duda me parece de lo mejor del director y lo digo bien alto. Me sorprende mucho que la mayoría de la gente no valore un film tan rico en matices y tan aprovechable como éste. Muy recomendable.
Bueno, ahora toca analizar la borralla: los films de Joel Schumacher sobre Batman, que revisitaré estos días torturándome la mente. Estad atentos.

Un saludo!